4º día y las cenizas volcánicas que llegaron el domingo por la madrugada siguen acompañándonos.
Anoche cuando Little Sister y Retoñor sacaron la basura agarré la máquina digital para sacar una foto, la puse en visión nocturna, pero verán que de nocturna tiene lo que yo de rubia . ¡Ajajajaa!
Si hacen clic se hace un poquito más grande.
Para que sepan, no está sucia la lente, esas “manchitas” son las cenizas que caen y las ilumina el flash de la máquina. La verdad que no está para salir a la intemperie y andar sacando fotos, así que van a tener que conformarse con lo que hay, ajaja!
Y hace un rato, estaba en mi cuenta de Twitter contando un poco como la venimos llevando (¿? ), y pensando (porque a veces pienso che ) en lo que estamos pasando escribo esto:
Ya saben que soy tan optimista que doy asco, y desde el domingo las cosas no pintan tan graciosas como para sobrellevarlas con demasiado humor, pero yo le encuentro el lado gracioso para descomprimir, si no, saldríamos a correr como locos por la calle gritando “lapocalipsis”, ¡ajajaja! Como dijo mi hijo el Retoñor el domingo al medio día en la mesa mientras comentábamos lo de las cenizas: “así se vería todo en un apocalipsis nuclear.”
Así que si bien el panorama no se ve muy halagador porque las cenizas van a acompañarnos mucho tiempo, no hay que perder el humor, o al menos tratar de no tomar todo a la tremenda, aunque – y aquí vienen mis ambivalencias -
- Las cenizas se meten por todos lados, limpiamos los muebles y a los 5’ están llenos del polvillo ceniciento que hay en el ambiente.
- Hay que enjuagar la vajilla antes de usarla.
- El piso es un desastre y Felipe (nuestro pastor alemán) se resbala, los retoños corren y frenan para resbalarse (si, con Little Sister estamos que los acogotamos, juas!), y no les cuento como patino con mis ruedas de la wheelchair (yo también agarro velocidad y trabo las ruedas para resbalarme, ¡ajajaja!).
- Aparte hay que sacudir la ropa a cada rato, y por más que estén cerradas las puertas y ventanas las cenizas entran igual, y hasta se puede sentir en la boca el polvillo… O será que como yo hablo tanto se me meten las cenizas a la boca, ¡ajajaja!
No, en serio, es horrible. Aparte que es algo que no lo podés “manejar”, y por más que uno tenga que “acostumbrarse” como dicen algunos funcionarios de nuestro gobierno del Chubut (que andan en auto y tienen empleadas que le limpien la casa, así cualquiera…), no es taaan fácil . O como dijeron en Twitter: @ivy_1969 ellos salen a dejar a los chicos a la escuela? O esperan el colectivo junto a los universitarios? Mato la frase #acostumbrarse no? (@emanuelurra EmanuelTw)
Sipi, ellos dicen en el diario:
Captura de la página del Diario El Chubut.
En fin, yo no me acostumbro.
Y miren que me acostumbro y me adapto a todo lo que me pasa, pero esta vez no es tan fácil.
Ahora las cosas siguen así:
- Mañana jueves 9 no hay clases (una mamá de la cooperadora me mandó un mail y me contó la novedad)
- Como la escuela cumple 25 años íbamos a tener una Cena Aniversario el sábado 25 de Junio a todo trapo pero me parece que si seguimos así, las condiciones no están dadas para llevarla a cabo…
- El viento sigue soplando y revolea las cenizas por todos lados, así que por ahora no caen del cielo, pero se levantan del piso y cubren toda la ciudad.
- Todo en la casa está lleno de cenizas, no se salvan ni las cosas que están en los cajones por más cerrados que estén.
- Y por más onda que uno le ponga el encierro no es muy lindo que digamos, y no solo el encierro de no salir a la calle salvo que no quede otra, si no que tenés que vivir con todo cerrado para que no se te meta la ceniza, y no es muy efectivo, doy fe.
Pero como dijera mi querido Abuelo Elio que ya no está con nosotros:
No hay mal que dure cien años, ni sonso que lo aguante…
Así que ya saben, hay que ver el vaso medio lleno… y en esta ocasión estará medio lleno de cenizas, pero medio lleno al fin, ¡juas!
Les dejo un videíto que subió ayer Malena (así se llama quién lo filmó ) a TN y la gente. Si siguen este enlace van a la página y ven algunos más, hasta fotos hay.
Será hasta las próximas novedades cenicientas.
Y si, me siento como la Cenicienta, salvo que a la media noche no aparece ningún príncipe, ¡ajaja!
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