Ojota que viene para largo. Y si, es lunes pero no sé resumir.
Tengo por costumbre revisar los comentarios del blog que llegan a mi correo antes de contestarlos, así puedo chusmear como viene la mano... Jeje! A veces no hago tiempo para dejar mi comentario agradeciéndoles el haber pasado por casita, pero siempre los leo....
Y ayer veo este comentario que dejaron en el post Mi locura tiene su razón de ser... en mi correo (hice una captura del comment como sale en el blog)
Me quedé helada.... Sin palabras.... [Ok, casi sin palabras....]
Y esto es lo que le contesté:
Anónimo de las 4:09 AM
La verdad que me dejaste sin palabras...
Lo único que te puedo decir es que Dios no es un perverso H. de P.
Y si bien el dolor de perder a un hijo debe ser.... no sé como debe ser, yo solo perdí a mi mamá en el accidente y ese es otro tipo de dolor, y no sé que hubiera hecho si perdía a mi retoño en el accidente, pero si algo aprendí de esto, es que una nunca encuentra ciertas respuestas a lo que pasó, pero que si quedamos vivos, es porque no era nuestro tiempo, porque tu hijo vino a cumplir una misión y solo requería que estuviera 11 meses con vos, pero SEGURO que en esos 11 meses te debe haber hecho la mujer más feliz del mundo....
Repito, no se que se siente al perder a un hijo, pero te puedo asegurar que la muerte es un paso más en nuestra existencia y que vos tenés que, por su memoria, seguir adelante y acordarte que él esta mucho mejor que nosotras.....
Ojalá que puedas leer esto y que al menos comprendas que nunca entenderemos porque sucede lo que sucede en nuestras vidas, pero un propósito habrá.....
Te dejo un beso y ojalá que al menos vuelvas a leer esto....
Ivana.-
No sé si Anónimo de las 4:09 AM volvió a leer el comentario que dejé, así que por eso quise compartirlo hoy.
No sé que se siente al perder un hijo, porque no lo perdí...., por poco.
No sé que hubiera hecho si me pasaba eso....
No sé porque estoy en una silla de ruedas, y por más que pregunto, no obtengo respuestas....
No sé porque existe el dolor, la muerte, la tristeza...
No sé porque decidimos viajar ese día si habíamos dicho que no íbamos a ir a ningún lado...
Muchas veces, sola en la cama de un hospital, sufriendo dolores que no se los deseo ni a mi peor enemigo, me preguntaba: ¿Por qué a mí? ¿Hasta cuándo voy a sufrir esto?
Pude haberme enojado con Dios, y haberlo maldecido, pero eso no hubiera hecho que mis dolores desaparecieran ni que mi vida volviera al 30 de Diciembre de 1998, un día antes del accidente.
Al contrario, sé que gracias a Dios estoy viva....
Gracias al conocimiento que tengo de que hay algo más después de esta vida, que no todo termina con la muerte, de que hay muchos misterios y dudas y cosas que no entiendo, puedo aceptar lo que estoy pasando.
Y lo más importante, es que entendí que NADA puede cambiar lo que ya sucedió, ni mi enojo, ni mi desesperación, ni mi angustia.
Lo que pasó, pasó.
Y si bien Anónimo de las 4:09 am piensa que Dios es un H. de P. porque está viva y su hijo no, yo creo, sé sin ninguna duda, que todo responde a un plan, que a veces no entendemos cual es nuestro rol o el de nuestros seres queridos....
Su hijito solo vivió 11 meses, y le fue arrebatado de una manera incomprensible. Nadie puede saber lo que siente porque no está en "sus zapatos", pero yo pienso que esos meses que ella tuvo a su hijo deben haber sido los meses más maravillosos y plenos, y que si él tuvo que partir, fue porque su parte en el plan estaba cumplida.
Yo sé que vamos a volver a ver a nuestros seres amados después que hayamos pasado a la otra vida, que este viaje por la tierra es sólo un paso en nuestro viaje hacia la eternidad.
Y sí, lo sé porque soy una chica religiosa, porque nací en una familia religiosa y porque mi religión me ayudó a aceptar que todo lo que me pasó es por una razón....
Y si la razón de quedar en una silla de ruedas fue para tener que aceptar mi nueva vida. Para tener que aceptar que las cosas iban a ser diferentes. Para aceptar tener que sólo ver a mi retoño correr y jugar por la ventana de casa o sentada en el jardín. Para empezar a escribir en este blog y demostrar que se puede. Si la razón de estar en una silla de ruedas es para aceptar que dependo de Dios y que gracias a Él estoy viva, y que pasar por dolores y cirugías y decepciones es parte del plan.... Pues si esa es la razón, las razones de haber quedado en una silla de ruedas, bienvenidas sean....
Sé que Dios se estará riendo, pero complacido porque ve que estoy aceptando lo que me pasa, y que estoy aceptando Su Mano en todo lo que me está sucediendo....
No puedo saber que se siente perder un hijo.... No puedo saber las respuestas a mis cuestionamientos del por qué me pasó lo que me pasó....
Pero lo que sí puedo saber, es que todo tiene un propósito, que no sabré el por qué, pero que tal vez entienda el para qué....
Y lo único que sé es que tengo que aceptar lo que me sucedió, seguir adelante, por mí, por mi Retoño, y porque si estoy viva, algo tengo que hacer en esta tierra.
Y no, no es fácil gente, es bastante difícil tener que aceptar lo que a uno le pasa, pero no es imposible....
Y siempre recuerden esto:
Porque no entiendan o acepten lo que pienso, significa que estoy equivocada.
Todo depende del cristal con que se mire.
Y por más que cueste, hay que mirar el vaso medio lleno.
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