Me caigo... y me levanto ché!!

¿Cuántas veces hemos escuchado o leído el dicho o la expresión, "Me caigo... y me levanto"?

En mi caso, fué "Me caigo... y me levantan"

Como saben -y si no, váyanse enterando... jijiii.. - soy mormona. Toda mi vida, con idas y venidas, pero mormona al fín!

Cada domingo nos juntamos para tener nuestras reuniones dominicales, de las cuales participo dirigiendo la música cuando cantamos los himnos. Modestia aparte (mhmmm... ¿viniendo de una leonina?, jaja!!) tengo buena voz, puedo ser una contralto como una soprano sin mucho inconveniente y tengo un volumen importante... - bueh! tanto físico como vocal! jajajajaa....!!! - así que soy la de la voz cantante!!! jaja!!

En fin, sigo, la reunión principal se hace en un salón importante, llenos de bancas y un estrado donde está el púlpito. Ese estrado está más alto, así que hay que subir dos escalones importantes, que mi wheelchair no lo hace! jjiiii... Para que pudiera subir, hicieron una rampita improvisada (firme, pero improvisada) que utilizaba cada domingo para subir y dirigir la música. El encargado de subirme por la rampita, era mi papá, que ya estaba canchero con esto de las inclinaciones y los ángulos de las rampas para hacerlo sin problemas....

Un domingo, mi padre (que habla hasta por los codos como yo, si no, ¿a quién salí? jaja!!) se demoró unos minutos y yo estaba lista para subir por la rampita... y viene un buen hermano en la fe (not, no voy a decir su nombre! jijii...) y me dice: "¿Te ayudo?", a lo que contesté: "Mire que no es no más..." Y él dijo: "Vamos Ivanita, yo te ayudo..." Y me ayudó.... a caer sentada en la rampa....

Para qué!!!, todos como locos, este pobre hombre no sabía qué hacer, yo sentada en la rampa muy campante, y mi viejo que vuela por sobre la baranda y se pone adelante mío para ver qué catzos hacía!!!! Recuerden, patagónica huesos grandes y bien revestidos! ;)

El asunto es que entre mi papá y Carlos (un urugayo genio total! amigo de la familia) como pudieron me levantaron y me sentaron otra vez en la wheelchiar...

¿Y ahora????.... ¿Qué hacemos??? Mi papá se acerca, yo lo abrazo por la cintura y ahí recién me pongo a llorar despacito (había como 100 personas esperando ver cómo seguía la historia...), mi hijo me abraza por atrás sin decir una palabra, pero podía sentir su corazoncito latiendo como loco en mi espalda, y mi primera reacción fué: ME VOY!!!... pero mi papá me dice: "Ok, ya está, ya pasó..., vamos, que hay que seguir...."

Me seca las lágrimas con su pañuelo, me dá un abrazote, me toca la cabeza y me dice:"Todo pasa..., y esto también..."

Me acomodé la ropa, me limpié el maquillaje que se me había corrido, (todo esto de espaldas a los hermanos), acomodé mi wheelchair mirando para delante... y empezamos la reunión....

Me caí... y me levantaron.... Y seguí adelante..., porque todo pasa...

Siempre pienso que todos pasamos cosas en nuestra vida que nos cambian la perspectiva 180º, a veces a los golpes - o a los vuelcos, como en mi caso, jijiii... - o como fuere, pero que siempre tenemos a nuestro alrededor una mano tendida para levantarnos....

Yo saqué algo importante de esta experiencia.... Me voy a caer, me voy a golpear, voy a sufrir, voy a llorar..., pero siempre, siempre voy a tener a mi lado, a mi hijo y mi familia para levantarme, consolarme y decirme que todo pasa....

Tal vez algunos no tengan esa bendición en sus vidas de contar con una familia cerca para ayudarlos, pero siempre hay una mano amiga extendida para consolarnos, levantarnos o simplemente para darnos una palmadita y juntar fuerzas para seguir adelante....

Hoy quise compartir esto porque la vida es... ¡hermosaa!!, y de los golpes, también se aprende!!!